Que los estándares son imprescindibles en cualquier sector de actividad parece algo evidente; y que cada cual aspira a implantar su propio estándar no lo es menos. Si centramos nuestra atención en el mercado GILT (globalización, internacionalización, localización y traducción), nos encontramos ante una notable necesidad de un estándar universal que soporte las necesidades multilingües de todos y en cualquier circunstancia en la web.