Disponer de un socio GILT de la máxima confianza es esencial para cualquier empresa que pretenda desarrollar una estrategia en distintos países y en más de una lengua. A continuación presentamos algunos errores en la traducción de campañas de publicidad que supusieron un enorme quebranto para las empresas que los cometieron. En todos los casos se produce una circunstancia común: no contaron con un socio suficientemente cualificado que tuviera en cuenta todos los aspectos que determinan una estrategia GILT de primer nivel (que van más allá de la mera traducción de los contenidos).
Boletín número 103