La experiencia me indica que en mucha ocasiones a la gestión y producción de la documentación multilingüe no se le da la importancia que verdaderamente merece. Y no tanto porque no se reconozca su relevancia sino porque se trata de un aspecto que tiende a presuponerse (no sólo por parte de los clientes, sino también por los propios profesionales del sector). Por ello, y porque la realidad muestra que las dificultades ante las que ha de enfrentarse son mayores de lo que parece, considero que no está de más reflexionar sobre este asunto.